Uff!, como pasa el tiempo de deprisa, me parece que fue ayer cuando vi las caras emocionadas de mis papás por primera vez, y ya llevo más de un mes disfrutando de ellos.
La verdad es que he crecido un montón, ya mido 55 cm y peso 4,200 kg, gracias a la leche de mamá estoy creciendo más a lo largo que a lo ancho. Pero lo mejor de ir creciendo no es aumentar de tamaño, es la cantidad de cosas que aprendo cada día. Ahora, si me ponen bocabajo, ya levanto la cabecita sola y si me la ponen de un ladito soy capaz de levantarla y ponerla del otro lado yo solita. También he aprendido a sonreír, cosa que les encanta a mis papis, y lo intento hacer bastante a menudo salvo cuando me duele la barriguita o tengo hambre que entonces lloro para que sepan que no estoy bien. Casi siempre me consuelan rápidamente, pero a veces ellos tampoco pueden hacer mucho y me pego un buen rato llorando, pero al final con sus mimos y masajes de barriga se me pasa. También he aprendido a coger cosas, a veces lo hago sin querer (como cuando cojo el pelo de mamá) pero otras veces lo hago queriendo, como sujetar su pecho mientras me da de comer. También he aprendido a tocar las campanitas de mi capazo y a pegar manotazos, sobre todo, cuando me acarician la cabeza para que me duerma y no me quiero dormir.
Durante este mes he vivido un montón de aventuras: he ido en metro, en autobús, en coche y sobre todo, en la mochila con papá que me gusta muchísimo porque se está muy bien tan pegadita a él. También me han llevado al rastro y me he subido a un escenario! Si el de las Jackies antes de su última función (por el momento) en el Teatro de las Aguas. (En las nuevas fotos podéis ver alguno de estos momentos)
Además, he tenido muchas visitas y también me han llevado a conocer a mucha gente, y todo el mundo me dice que soy muy guapa, y la mayor parte dicen también que me parezco a papá. Bueno, y encima, no paran de hacerme regalos que si los tíos, que si los amigos, que si los vecinos, y todo son cosas muy bonitas y sobre todo, muchos vestiditos veraniegos que son realmente monísimos y que me muero de ganas de estrenar. Dice papá que cree que voy a ser tan presumida como mamá, por lo pronto ya tengo más ropa que ella así que puede que tenga razón. (En las fotos nuevas me podéis ver vestida de “la tenista más guapa de la pista”, je je.)
Bueno, pues muchos besotes para todos, ah! y para los que no conozco todavía, animaros a venir a verme que tengo muchas ganas de conoceros.
La verdad es que he crecido un montón, ya mido 55 cm y peso 4,200 kg, gracias a la leche de mamá estoy creciendo más a lo largo que a lo ancho. Pero lo mejor de ir creciendo no es aumentar de tamaño, es la cantidad de cosas que aprendo cada día. Ahora, si me ponen bocabajo, ya levanto la cabecita sola y si me la ponen de un ladito soy capaz de levantarla y ponerla del otro lado yo solita. También he aprendido a sonreír, cosa que les encanta a mis papis, y lo intento hacer bastante a menudo salvo cuando me duele la barriguita o tengo hambre que entonces lloro para que sepan que no estoy bien. Casi siempre me consuelan rápidamente, pero a veces ellos tampoco pueden hacer mucho y me pego un buen rato llorando, pero al final con sus mimos y masajes de barriga se me pasa. También he aprendido a coger cosas, a veces lo hago sin querer (como cuando cojo el pelo de mamá) pero otras veces lo hago queriendo, como sujetar su pecho mientras me da de comer. También he aprendido a tocar las campanitas de mi capazo y a pegar manotazos, sobre todo, cuando me acarician la cabeza para que me duerma y no me quiero dormir.
Durante este mes he vivido un montón de aventuras: he ido en metro, en autobús, en coche y sobre todo, en la mochila con papá que me gusta muchísimo porque se está muy bien tan pegadita a él. También me han llevado al rastro y me he subido a un escenario! Si el de las Jackies antes de su última función (por el momento) en el Teatro de las Aguas. (En las nuevas fotos podéis ver alguno de estos momentos)
Además, he tenido muchas visitas y también me han llevado a conocer a mucha gente, y todo el mundo me dice que soy muy guapa, y la mayor parte dicen también que me parezco a papá. Bueno, y encima, no paran de hacerme regalos que si los tíos, que si los amigos, que si los vecinos, y todo son cosas muy bonitas y sobre todo, muchos vestiditos veraniegos que son realmente monísimos y que me muero de ganas de estrenar. Dice papá que cree que voy a ser tan presumida como mamá, por lo pronto ya tengo más ropa que ella así que puede que tenga razón. (En las fotos nuevas me podéis ver vestida de “la tenista más guapa de la pista”, je je.)
Bueno, pues muchos besotes para todos, ah! y para los que no conozco todavía, animaros a venir a verme que tengo muchas ganas de conoceros.
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